Gracias al entrelazamiento cuántico, una de las propiedades más sorprendentes de la mecánica cuántica, hoy se está desarrollando una nueva forma de comunicación ultra segura: la criptografía cuántica.
A diferencia de la criptografía tradicional, que se basa en cálculos matemáticos complejos, la criptografía cuántica utiliza principios físicos. En particular, aprovecha el hecho de que medir una partícula cuántica cambia su estado. Si alguien intenta interceptar un mensaje cuántico, la intrusión puede ser detectada inmediatamente.
Este método permite establecer claves secretas entre dos personas (o computadoras) de forma absolutamente segura. Si un tercero intenta espiar, deja una "huella cuántica" que revela el intento de hackeo.
Este tema permite explorar cómo la física cuántica puede proteger la información en el futuro, y por qué es una herramienta clave para la seguridad en un mundo cada vez más digital.